La
Serpiente
Sabia, astuta, posesiva, desconfiada, sensitiva y materialista.
Tiende a poseer facultades psíquicas y paranormales, un
sexto sentido innato, les hace presentir los peligros.
En ocasiones se mueven
basándose en sus presentimientos.
Debido a su carácter sensitivo, la Serpiente puede percibir
mas allá de las emociones humanas, cosa que le favorece en caso de optar por
puestos de videncia, parapsicología, psicología y psiquiatría, la docencia y
las artes interpretativas, también son campos en los que se desenvuelven con
soltura.
Siempre y cuando no afecte a su economía, la Serpiente sabrá
aconsejar a quien se lo pida.
Con tendencias materialistas, a veces le cuesta ser algo
generosa para con los demás, ya que su mayor malestar es el desprenderse de sus
ahorros; no obstante, es aficionada al juego, tal vez sea por su parte
sensitiva, que le haga tener algo de intuición en el azar.
También pueden optar por la búsqueda de la pareja bien situada, o por las inversiones arriesgadas para obtener rápidos beneficios.
En la pareja, su faceta posesiva y un tanto celosa, les
haría imposible perdonar una traición.
Son seres muy coquetos, en el caso de las mujeres, les
agrada gustar a los demás y en el caso de los hombres, su aspecto físico es una
de sus grandes preocupaciones.
A la hora de elegir pareja, son un tanto indecisas, cosa que les puede hacer rozar la infidelidad.
Una vez establecidas,
pueden llegar a ser buenas compañeras.
No suelen ser aventureras, por lo que no les gustan las
sorpresas ni la vida llena de sobresaltos.
Son exigentes con quienes las rodean, cosa que no hacen para
ellas mismas.
Aman el lujo y todo lo que pueda representarlo, por lo que
suele ser habitual verlas con joyas y complementos de valor.